¿Ya te uniste al club de los “runners virtuales”?: Una mirada al universo de las carreras digitales

Algunos corredores se preguntan cuál es el punto de participar en una carrera sin ver a los competidores, conocer sus marcas en tiempo real y recibir una medalla de parte de los organizadores. Sin embargo, esta modalidad de competición está ganando un terreno cada vez más amplio. Aquí exploraremos qué buscan los que participan en carreras de running virtual y cuáles son las más populares.

¿Qué es una “carrera de running virtual”?

En esencia, una carrera de running virtual es una competición que se lleva a cabo de forma individual, donde los ganadores se dan a conocer mediante la publicación de una tabla a través de plataformas digitales. Un cierto número de organizaciones ha abrazado esta tendencia. Estas carreras no son únicamente eventos deportivos, sino también se utilizan como herramientas efectivas para la recaudación de fondos en apoyo a diversas causas benéficas.

El primer paso del proceso es la inscripción en la carrera. Esto a menudo incluye recibir material exclusivo, como dorsales y camisetas que se entregan a domicilio. Se comprueba la ejecución a través de evidencias digitales, como capturas de pantalla de aplicaciones de ejercicio físico. Luego, los resultados se registran en tablas virtuales y de estas sale un ganador.

Utilizan un sistema de puntos parecido al que tienen algunas de las casas de apuestas deportivas, donde se da a conocer al ganador de la semana. En las apuestas, esta persona es la que ha tenido más aciertos. En el running, la que ha llegado más lejos.

El desenfado, una característica de las carreras virtuales

La flexibilidad es una de las claves de las carreras virtuales, ya que muchos participantes buscan correr en los horarios que más les conviene y en los sitios de su preferencia, a menudo aislados de alguna ciudad. Es por eso que las carreras virtuales, en cierta forma, no compiten con las carreras tradicionales. Muchos organizadores han entendido esto y por eso aprovechan al máximo su naturaleza desenfadada y lúdica.

Un ejemplo claro es "The Virtual Beer Mile - like the Olympics but with boozing" (La Milla Virtual de la Cerveza, como los Juegos Olímpicos pero con alcohol). Se trata de una carrera virtual celebrada en California en la que hay “paradas técnicas” en cervecerías. En definitiva, refleja el espíritu divertido y poco convencional de estas competiciones.

Otra organización que entendió el concepto es el Hogwarts Running Club, cuyas carreras están inspiradas en el mundo de Harry Potter. Esta comunidad se destaca también por apoyar diversas causas benéficas. Sin embargo, no descuidan el entrenamiento duro: esta semana, la lista está encabezada por una persona que completó 223.9 km en los últimos días.

¿Qué sentido tiene correr una carrera virtual?

Las carreras virtuales carecen de restricciones de tiempo, compañeros corredores y rutas predeterminadas en las que se pueda conocer un lugar nuevo. Para algunos, estas “carencias” pueden significar que correrlas no tenga sentido. Sin embargo, su popularidad es creciente.

¿Qué le ven los corredores a estas competencias? Posiblemente, sea el énfasis en alcanzar metas personales y superar sus propias marcas. Al mismo tiempo, estas aplicaciones permiten correr a destiempo y en distintos sitios. Por eso, estas carreras son especialmente beneficiosas para aquellos que viven en áreas remotas, trabajan en horarios no convencionales o tienen responsabilidades familiares que dificultan prever momentos específicos para correr.

Aunque los detalles varían entre las numerosas compañías y organizaciones que ofrecen estas experiencias virtuales, el concepto básico sigue siendo el mismo: pagar, correr la distancia cuando y donde desees, y recibir la medalla por correo.

Mientras algunos organizadores establecen plazos específicos y requieren pruebas visuales, como fotos o capturas de pantalla de aplicaciones, otros adoptan un enfoque más relajado basado en la confianza. Algunos incluso permiten dividir la distancia en varias corridas, caminatas o trotes, brindando a los participantes la flexibilidad de adaptarse a sus propios horarios y preferencias.